Seguro que el título os suena de algo....Ya veréis.Ludo (Jean Dujardin) es un hombre muy alegre, generoso con los demás y que sabe pasárselo francamente bien. En un día normal, una fiesta cualquiera, sucede algo que cambiará su vida por completo. Está agotado; ha tomado drogas. Abandona el local hacia su casa; ya es de madrugada cuando Ludo se sube a su moto y se dirige a su casa. En un cruce mal señalizado, sucede todo muy rápido: es golpeado brutalmente por un camión a gran velocidad.
Sus amigos están muy conmocionados por la noticia. Marie (Marion Cotillard, Mahl en Origen),etnóloga, una joven temerosa ante el amor duradero que se aprovecha de los hombres, ha ido rápidamente a visitar a su amigo,
Max Cantara, un rico empresario obsesivo y pulcro, obsesionado con demostrar su poder adquisitivo a los demás. A su lado está Vero, la esposa naturalista que siempre convive con su excentricidadatosigante.

Vincent (Benoît Magimel), un fisioterapeuta que ha vivido con su mujer Isabelle (Pascalle Arbillot), la cual cree llevar una vida frustrante (piensa no equívocamente que su marido no la quiere) y con su hijo plácidamente, hasta de que se da cuenta de una terrible verdad: está enamorado de uno de sus pacientes...Max Cantara.
Antoine, amante soñador, indeciso en exceso,adorador de su novia, Juliette, y cuya relación con ella se encuentra en un punto crítico:ha mandado mensajes muy poco esperanzadores y no sabe qué hacer.
Éric (Gilles Lellouche) es una actor de telefilmes que no se ve capaz de mantener realciones amorosas duraderas por su tozudez ante sus predicciones amorosas. Es compañero de fiestas del convaleciente Ludo. Es amante de Léa, cantante de ópera en ciernes.
A pesar del accidente tan terrible, es tradición del grupo de amigos ir dos unas semanas de vacaciones a un pueblecito costero francés. A pesar de las quejas de muchos, deciden dejar a Ludo solo en el hospital. Ante cualquier problema, dicen, estarían a una hora de avión de París.
Pero estas vacaciones no son como las demás. La incómoda confesión de Vincent hace que Max se vuelva aún más extravagante, generandose entre estos dos amigos gran tensión en cualquier situación. El brusco cambio tras 11 años de la pareja de Antoine lo sumerge en un estado de confusión constante, con dilemas de proporciones titánicas ante simples SmS's que le manda. Éric sufre una crisis de personalidad que le hace cuestionarse cómo quiere vivir su amor, y su futuro. Y el pobre Ludo se encuentra en un fino lapso entre vida y muerte. Es evidente que todo en el grupo ha cambiado sustancialmente. Esa confianza que se respiraba, ha desaparecido por completo y las peleas y lágrimas están a la orden del día. El comunicado de una terrible noticia (deduzcanla ustedes) por parte de Jean-Luis, un amable pescador de ostras, les hace ver cuñanto se han equivocado, y cuanto se han alejado de lo que antes era una gran amistad.
En resumen, es una película maravillosa que recomiendo ir a ver a todo el mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario