¿A modo de explicación?

En este blog confluyen ideas de todo tipo...magia, cine, literatura, opinión, más magia...en ambiente de serenidad y exclusivo característico de todo blog con pocos seguidores. De modo que, si estás visitando el blog por tu propia voluntad...¡disfruta todo lo que puedas!
¡Y todo, de mi puño y letra! (bueno, de mi puño y tecla)
¡Sorpréndete! Acabarás más perdido que un pulpo en un garaje...

Powered By Blogger

Música

domingo, 29 de mayo de 2011

viernes, 27 de mayo de 2011

Pequeñas mentiras, sí...pero sin importancia.

Seguro que el título os suena de algo....Ya veréis.Ludo (Jean Dujardin) es un hombre muy alegre, generoso con los demás y que sabe pasárselo francamente bien. En un día normal, una fiesta cualquiera, sucede algo que cambiará su vida por completo. Está agotado; ha tomado drogas. Abandona el local hacia su casa; ya es de madrugada cuando Ludo se sube a su moto y se dirige a su casa. En un cruce mal señalizado, sucede todo muy rápido: es golpeado brutalmente por un camión a gran velocidad.

Sus amigos están muy conmocionados por la noticia. Marie (Marion Cotillard, Mahl en Origen),etnóloga, una joven temerosa ante el amor duradero que se aprovecha de los hombres, ha ido rápidamente a visitar a su amigo,

en estado crítico: morado, sangrante por todas las extremidades y un silencio por su parte, realmente alarmante.El resto del grupo no tarda en llegar:

Max Cantara, un rico empresario obsesivo y pulcro, obsesionado con demostrar su poder adquisitivo a los demás. A su lado está Vero, la esposa naturalista que siempre convive con su excentricidadatosigante.

Antoine, amante soñador, indeciso en exceso,adorador de su novia, Juliette, y cuya relación con ella se encuentra en un punto crítico:ha mandado mensajes muy poco esperanzadores y no sabe qué hacer.

Vincent (Benoît Magimel), un fisioterapeuta que ha vivido con su mujer Isabelle (Pascalle Arbillot), la cual cree llevar una vida frustrante (piensa no equívocamente que su marido no la quiere) y con su hijo plácidamente, hasta de que se da cuenta de una terrible verdad: está enamorado de uno de sus pacientes...Max Cantara.

Éric (Gilles Lellouche) es una actor de telefilmes que no se ve capaz de mantener realciones amorosas duraderas por su tozudez ante sus predicciones amorosas. Es compañero de fiestas del convaleciente Ludo. Es amante de Léa, cantante de ópera en ciernes.

A pesar del accidente tan terrible, es tradición del grupo de amigos ir dos unas semanas de vacaciones a un pueblecito costero francés. A pesar de las quejas de muchos, deciden dejar a Ludo solo en el hospital. Ante cualquier problema, dicen, estarían a una hora de avión de París.
Pero estas vacaciones no son como las demás. La incómoda confesión de Vincent hace que Max se vuelva aún más extravagante, generandose entre estos dos amigos gran tensión en cualquier situación. El brusco cambio tras 11 años de la pareja de Antoine lo sumerge en un estado de confusión constante, con dilemas de proporciones titánicas ante simples SmS's que le manda. Éric sufre una crisis de personalidad que le hace cuestionarse cómo quiere vivir su amor, y su futuro. Y el pobre Ludo se encuentra en un fino lapso entre vida y muerte. Es evidente que todo en el grupo ha cambiado sustancialmente. Esa confianza que se respiraba, ha desaparecido por completo y las peleas y lágrimas están a la orden del día. El comunicado de una terrible noticia (deduzcanla ustedes) por parte de Jean-Luis, un amable pescador de ostras, les hace ver cuñanto se han equivocado, y cuanto se han alejado de lo que antes era una gran amistad.

La película me parece brillante, y me guardo el final para que, si espero vayáis, la disfrutéis aún más si se puede. Es una película que yo califico de "drama de amigos", con una genial introducción de los personajes, que hace que en pocos minutos, los conozcas, sepas cómo van a actuar, qué van a hacer...Es un filme que te hace disfrutar y alegrarte infinitamente cuando los ves reír y piensas ojalá mi grupo de amigos fuese así y sientes profunda tristeza cuando presencias las riñas y lloros de la pintoresca troupe. Incluso el pobre Ludo, del que no se sabe casi nada, crea en ti una sensación de amargura cuando ves a los personajes reaccionar de forma tan real ante una frase tan breve: Ludo est mort.

En resumen, es una película maravillosa que recomiendo ir a ver a todo el mundo.

miércoles, 25 de mayo de 2011

El "coloquio" de los perros...

Nos llevan años de ventaja...